Era un amistoso más para Hispano F.C. Era la posibilidad de conocer un nuevo torneo. Era la excusa para juntarse y pasar un buen momento. Todo eso era, pero se transformo en algo mucho más trascendente.
Estaba todo organizado, los Hispanenses jugaban el sábado a las 13.30 en Areia con rival a confirmar. Los muchachos de Bertone esperaban tranquilos este partido hasta que el viernes recibieron una noticia increíble: “Los de Pampa F.C. juegan en Areia a la misma hora un amistoso con rival desconocido”. La pregunta broto automáticamente: Será contra nosotros? La respuesta la iban a tener recién al otro día y ansiedad dijo presente.
Sábado 13.00- Los Hispanenses llegaron en caravana hasta el predio de Areia, buscando algún auto conocido. La búsqueda no demoro mucho, los Pampeanos estaban bajando de sus coches. Che jugamos contra ustedes? Se preguntaron al unisono. La respuesta todavía no estaba.
Ambos equipos recorrieron el lugar en búsqueda del organizador. Una vez ubicado se despejo todo. “Si quieren jueguen entre ustedes”, dijo como si fuera algo normal e ignorando las implicancias que este partido traería. No había nada más que hablar Hispano F.C. y Pampa F.C. se volvían a encontrar en una cancha después de mucho tiempo.
EL PARTIDO
Estaba todo organizado, los Hispanenses jugaban el sábado a las 13.30 en Areia con rival a confirmar. Los muchachos de Bertone esperaban tranquilos este partido hasta que el viernes recibieron una noticia increíble: “Los de Pampa F.C. juegan en Areia a la misma hora un amistoso con rival desconocido”. La pregunta broto automáticamente: Será contra nosotros? La respuesta la iban a tener recién al otro día y ansiedad dijo presente.
Sábado 13.00- Los Hispanenses llegaron en caravana hasta el predio de Areia, buscando algún auto conocido. La búsqueda no demoro mucho, los Pampeanos estaban bajando de sus coches. Che jugamos contra ustedes? Se preguntaron al unisono. La respuesta todavía no estaba.
Ambos equipos recorrieron el lugar en búsqueda del organizador. Una vez ubicado se despejo todo. “Si quieren jueguen entre ustedes”, dijo como si fuera algo normal e ignorando las implicancias que este partido traería. No había nada más que hablar Hispano F.C. y Pampa F.C. se volvían a encontrar en una cancha después de mucho tiempo.
EL PARTIDO
Una vez cambiados y listos los equipos se presentaron en la cancha. Hispano formo con: Sarlanga A., Bertone, Iglesias, Massa, Marenzi, Arzúa y Albaro; afuera esperaban su turno: Munari, Sarlanga M. y el recién incorporado Galano.
Pampa por su parte presento estos nombres: Rodríguez J., Campos, Madero, Crespo, Álvarez, Rodríguez y Dieguez, detrás de la línea de cal el “Pelado” Lorenzo era el refuerzo.
Pitazo inicial y la pelota estaba en juego. Como todo clásico los primeros minutos fueron de análisis, ningún equipo quería cometer errores y los arcos estaban vírgenes de situaciones. Hasta que Hispano F.C. empezó a tomar protagonismo y a hacerse dueño de la cancha. Los Hispanenses corrían, mordían, tocaban y jugaban como nunca ante la atónita mirada de los Pampeanos que eran espectadores de lujo. El primer gol de Hispano no tardo en llegar y en un contragolpe letal Marenzi abrió el marcador. Festejo, pero a seguir de la misma manera. Toque y juego, juego y toque fueron las armas que llevaron a Hispano a marcar el 2do. y el 3er. gol de la mano de Aruza y Albaro respectivamente. Los Pampeanos estaban desconcertados, no entendían lo que estaba pasando y muchos se estaban arrepintiendo de haber ido a Areia.
El segundo tiempo ya encontró dentro del campo de juego a los refuerzos, Galano, Munari y Sarlanga M. para Hispano y Lorenzo para Pampa.
Nada cambio bueno para ser sinceros si cambio algo, el resultado. Los Hispanenses seguían atacando como si fuera el primer minuto y en una jugada combinada entre los hermanos Sarlanga, bochazo desde de arco a arco y sombrero de Matías, Hispano marcaba el 4to. y se iba gestando la goleada que en ese momento ya era obvia.
Los Pampeanos no tenían piernas, ánimos ni ideas, todo se les hacia cuesta arriba. El nerviosismo y la impotencia también hacían lo suyo. Gritos entre compañeros, caras largas y frustradas era lo único que pusieron en la cancha. Hasta que en una jugada con muchos rebotes encontraron boyando una pelota y anotaron el descuento 4-1.
Hispano como si nada seguía con los suyo, el 5to. y 6to. gol no tardaron en llegar (Munari, Massa). El arquero Pampeano, a pesar de la goleada se transformo en la figura de su equipo, tapando muchos mano a mano y evitando que el partido se transformara en catástrofe.
Hispano volvió a anotar en otras 2 oportunidades (Albaro e Iglesias), llegando al global de 8-1. Pitazo final, baile y goleada histórica que seguramente dejara cicatriz en la memoria de los Hombres de Negro. Todo lo contrario lo vivió Hispano que atesorara este 4 de julio como fecha patria del club.
Esta goleada para los Hispanenses vale doble, no solo humillo a su clásico rival sino que también puso a su favor el historial.
Pampa por su parte presento estos nombres: Rodríguez J., Campos, Madero, Crespo, Álvarez, Rodríguez y Dieguez, detrás de la línea de cal el “Pelado” Lorenzo era el refuerzo.
Pitazo inicial y la pelota estaba en juego. Como todo clásico los primeros minutos fueron de análisis, ningún equipo quería cometer errores y los arcos estaban vírgenes de situaciones. Hasta que Hispano F.C. empezó a tomar protagonismo y a hacerse dueño de la cancha. Los Hispanenses corrían, mordían, tocaban y jugaban como nunca ante la atónita mirada de los Pampeanos que eran espectadores de lujo. El primer gol de Hispano no tardo en llegar y en un contragolpe letal Marenzi abrió el marcador. Festejo, pero a seguir de la misma manera. Toque y juego, juego y toque fueron las armas que llevaron a Hispano a marcar el 2do. y el 3er. gol de la mano de Aruza y Albaro respectivamente. Los Pampeanos estaban desconcertados, no entendían lo que estaba pasando y muchos se estaban arrepintiendo de haber ido a Areia.
El segundo tiempo ya encontró dentro del campo de juego a los refuerzos, Galano, Munari y Sarlanga M. para Hispano y Lorenzo para Pampa.
Nada cambio bueno para ser sinceros si cambio algo, el resultado. Los Hispanenses seguían atacando como si fuera el primer minuto y en una jugada combinada entre los hermanos Sarlanga, bochazo desde de arco a arco y sombrero de Matías, Hispano marcaba el 4to. y se iba gestando la goleada que en ese momento ya era obvia.
Los Pampeanos no tenían piernas, ánimos ni ideas, todo se les hacia cuesta arriba. El nerviosismo y la impotencia también hacían lo suyo. Gritos entre compañeros, caras largas y frustradas era lo único que pusieron en la cancha. Hasta que en una jugada con muchos rebotes encontraron boyando una pelota y anotaron el descuento 4-1.
Hispano como si nada seguía con los suyo, el 5to. y 6to. gol no tardaron en llegar (Munari, Massa). El arquero Pampeano, a pesar de la goleada se transformo en la figura de su equipo, tapando muchos mano a mano y evitando que el partido se transformara en catástrofe.
Hispano volvió a anotar en otras 2 oportunidades (Albaro e Iglesias), llegando al global de 8-1. Pitazo final, baile y goleada histórica que seguramente dejara cicatriz en la memoria de los Hombres de Negro. Todo lo contrario lo vivió Hispano que atesorara este 4 de julio como fecha patria del club.
Esta goleada para los Hispanenses vale doble, no solo humillo a su clásico rival sino que también puso a su favor el historial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario